A los juerguistas nocturnos que regresaron en las primeras horas de ayer, 5 de noviembre, se les podría haber perdonado que no creyeran ante sus ojos cansados, ante lo que resultaron ser camellos merodeando por las calles de Madrid.
En concreto, ocho camellos y una llama eran los que habían escapado de un circo cercano y fueron vistos alrededor de las 5 de la mañana del viernes deambulando por las calles cercanas al Vía Lusitania en el distrito sur de Carabranchel, cerca de donde tiene su sede el circo.
Fueron vistos alrededor de las cinco de la mañana del viernes deambulando por el barrio sureño de Carabranchel, cerca de donde actualmente tiene su sede el circo.
«Varios camellos y una llama escaparon de un circo en Madrid durante la noche», dijo la policía nacional de España en Twitter, compartiendo imágenes de ocho camellos de dos jorobas y una llama merodeando por una esquina.
Varios camellos🐫🐫🐫 y una llama 🦙 se han escapado esta noche de un #circo es #Madrid.
Agentes de la UPR🚔 los han localizado y custodiado para que pudieran volver sanos y salvos.#AmamosAlosAnimales💙 pic.twitter.com/4bX5T9cICf
— Policía Nacional (@policia) 5 de noviembre de 2021
El director del circo, Mati Muñoz, expresó su alivio porque los fugitivos habían sido capturados.
“No pasó nada, gracias a Dios”, dijo.
Muñoz dijo que el circo había presentado una denuncia después de descubrir que la cerca eléctrica alrededor del recinto de los animales había sido cortada.
Los camellos bactrianos provienen de los desiertos rocosos del centro y este de Asia y tienen una extraordinaria capacidad para sobrevivir en condiciones extremas, incluido Carabanchel, al parecer.