Según la Dirección de Tráfico (DGT), estas cámaras servirán para controlar las infracciones de tráfico: conducción negligente/imprudente, adelantamientos en lugares prohibidos. No son radaresLa DGT afirma que la velocidad seguirá siendo controlada mediante radares móviles en puntos no especificados de la carretera.

Indignats MA-10 es un colectivo de vecinos que lleva años haciendo campaña para detener carreras ilegales en la Tramontana. Además de la seguridad vial, el ruido provocado por estas carreras (principalmente de motos) ha sido la principal preocupación del grupo.

Las nuevas cámaras están diseñadas para combatir las carreras ilegales, pero el grupo insiste en que las cámaras no son lo que se acordó en una reunión celebrada hace dos meses. «Han decidido instalar cámaras sin sonómetros o radares de velocidad tal y como nos prometieron en la reunión en el Consell de Mallorca. Estas cámaras sólo grabarán imágenes y listo.»

El grupo ya se ha mostrado indignado por determinadas declaraciones de la DGT, como que la velocidad media en la MA-10 era de sólo 35 km/h. Por ello los vecinos exigen «Dimisión inmediata» de la directora de la DGT Francisca Ramis: «Están gastando dinero público pero sin solucionar ni combatir el problema».

En la reunión de hace dos meses, el grupo consideró que finalmente se habían llegado a acuerdos entre los organismos competentes: la DGT, el Consell de Mallorca y la Guardia Civil. Pero los problemas persisten. La DGT señala que existen diferentes responsabilidades. La DGT no tiene la facultad de imponer sanciones por ruido excesivo. Esto es algo que corresponde al Consell y al Govern balear, que no tuvo representantes en la reunión.