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Cree una serie de preguntas relacionadas con los objetivos de análisis que le gustaría responder y anote las dimensiones que le interesa explorar, es decir, períodos de tiempo específicos, nuevos usuarios, usuarios en un determinado grupo de edad o área geográfica, etc.

Ejemplo: para un análisis sobre la participación de los usuarios, un gerente de producto puede querer saber cuántas veces los nuevos usuarios suelen visitar su sitio web en el primer mes o en el segundo.

Recopile cualquier investigación previa, conocimiento organizacional y suposiciones ampliamente aceptadas relacionadas con el tema de análisis. Revise lo que se ha investigado o analizado previamente para comprender lo que ya se sabe en este campo.

Tome nota de si existen respuestas históricas a alguna de sus preguntas de análisis. Nota: cuando determine qué tan relevantes son esas respuestas, considere la cantidad de tiempo transcurrido desde cualquier análisis anterior y si ha habido cambios significativos en la población de análisis o en el producto/servicio desde entonces.

Ejemplo: Siguiendo con la nueva idea de la actividad del usuario, tal vez alguien hizo un análisis hace dos años que identificó que la actividad de los usuarios disminuyó y se estancó 5 semanas después de la creación de la cuenta. Si la empresa introdujo una nueva campaña de goteo de 6 semanas para nuevos usuarios hace un año, es posible que esta información ya no sea relevante.

Una vez que haya sintetizado sus objetivos y preguntas clave, podrá identificar qué datos relevantes están fácilmente disponibles y qué datos complementarios son potencialmente accesibles. Verifique sus permisos para cada fuente de datos y solicite acceso a los propietarios de datos/procesos para cualquier conjunto de datos complementario. Dedique algún tiempo a familiarizarse con los conjuntos de datos y descarte cualquier pregunta de su lista que no sea posible responder con los datos que tiene.

Realice un ejercicio de priorización con las partes interesadas clave, por ejemplo, un gerente de producto, para comprender qué preguntas creen que son más importantes. Es una buena idea indicar la complejidad de las preguntas de su lista antes de esta conversación para ilustrar el nivel de esfuerzo para responderlas. Si las preguntas de su lista requieren más trabajo del que es factible en un solo análisis, utilice esas prioridades para determinar cómo escalonarlas en múltiples análisis.