La Mesa del Congreso (donde el PSOE y sus socios tienen mayoría) ha rechazado este martes la petición del Senado de retirar y anular la tramitación de la ley de amnistía. Los letrados del Senado, también llamado Cámara alta, consideran que el proceso en el Congreso ha sido erróneo porque esconde una reforma de la Constitución. Sin embargo, sus homólogos en la Cámara baja no lo ven así y defienden su manera de proceder.
Estos expertos jurídicos argumentan que el Congreso ha actuado «en el ejercicio constitucional y reglamentario de sus atribuciones» al remitir la proposición de la ley orgánica de la amnistía y había solicitado a la Mesa (presidida por la socialista Francina Armengol) que desestimara por «improcedente» dicha petición, que califican de «injerencia». Armengol y el resto de miembros de la Mesa lo han hecho en la reunión de este martes. El PP no confirma que vaya a acudir al Tribunal Constitucional en este momento de proceso. Sí que lo hará cuando la norma esté aprobada totalmente, dentro de unas semanas. Alfonso Rodríguez Gómez de Celis, miembro de la Mesa por parte del PSOE, ha pedido a los populares que vuelvan «al orden constitucional» y, si están tan seguros de que no está bien el procedimiento, acudan al Constitucional. Según Rodríguez Gómez de Celis no lo harán, porque saben que su protesta no tiene sentido. Ahora, la Mesa del Congreso informará al Senado, ha añadido.
[–>
El requerimiento del Senado, que había sido impulsado por el PP, que tiene mayoría absoluta en ese hemiciclo, defendía que la ley se tendría que haber tramitado como una reforma de la Constitución y no como una ley orgánica. Los letrados del Congreso argumentan, sin embargo, que las cuestiones procedimentales han sido correctas en cuanto a plazos y procedimiento de los debates. Señalan que no les pertoca «efectuar un control de constitucionalidad».