- Las nuevas leyes de la UE sobre la cadena de suministro siguen afectando a las empresas del Reino Unido después del Brexit
- Las nuevas normas significan que las empresas farmacéuticas y sanitarias del Reino Unido pueden ser legalmente responsables por su incumplimiento
La mayoría de las empresas ya han tomado medidas para cumplir con la Directiva de Diligencia Debida sobre Sostenibilidad Corporativa (CSDDD) de la UE recientemente promulgada, según una encuesta realizada por expertos en cadenas de suministro INVERTO, parte de Boston Consulting Group.
El 84% de las empresas activas en el sector farmacéutico y sanitario ven la Directiva de diligencia debida sobre sostenibilidad corporativa de la UE como una oportunidad para alinear los derechos humanos y la protección del medio ambiente con sus objetivos comerciales. Esta nueva directiva exigirá que las empresas con una facturación superior a 450 millones de euros publiquen información detallada sobre la sostenibilidad y los derechos humanos en sus cadenas de suministro y adopten políticas eficaces para garantizar su cumplimiento.
Las empresas farmacéuticas y sanitarias del Reino Unido deberán asegurarse de que sus operaciones en la UE cumplan con la nueva directiva, ya que ahora serán legalmente responsables del incumplimiento de sus filiales y/o proveedores.
Algunos de los riesgos potenciales para los derechos humanos que existen dentro del sector farmacéutico y sus cadenas de suministro incluyen:
- Prácticas laborales poco éticas, particularmente para proveedores en mercados emergentes
- Violaciones de la privacidad del paciente
- Infringir estándares éticos y de consentimiento informado en la realización de ensayos clínicos así como en el almacenamiento de datos personales y de salud, especialmente de personas vulnerables.
- El peligro que supone para la salud de los pacientes la proliferación de medicamentos falsificados
- La destrucción del medio ambiente natural asociada a la producción farmacéutica, como la acumulación de residuos y el consumo excesivo de agua local.
En total, el 74% de estas empresas cree que el cumplimiento de la directiva es factible y ya ha implementado medidas. Estos incluyen desarrollar procedimientos de cumplimiento (77%), emitir un informe financiero anual (69%), colaborar con otras empresas del mismo sector (63%) y monitorear indicadores de desempeño (63%).
Una oportunidad con costos, pero también con retornos esperados
El 82% de los participantes en la encuesta anticipa que el CSDDD incurrirá en costos, aunque la mayoría anticipa que serán bajos o moderados. A largo plazo, el 60% cree que el impacto financiero será positivo y anticipa un retorno de la inversión.
Más allá del aspecto financiero, muchos encuestados también ven un impulso positivo en la promulgación de la ley: por ejemplo, regulaciones más estrictas podrían tener un impacto positivo en su imagen (55%) y promover el respeto de los derechos humanos (55%). Otras razones importantes para implementar medidas incluyen una mayor responsabilidad ambiental (51%) y mejores relaciones con los clientes y otras partes interesadas.
El 47% de los encuestados del sector sanitario y farmacéutico consideran el rendimiento financiero como la principal tarea de las adquisiciones. Sólo el 18% prioriza la mejora del impacto ambiental y social de las cadenas de suministro, un 13% menos en comparación con todas las empresas encuestadas.
Desafíos en la implementación
Muchos participantes de la encuesta del sector sanitario se muestran escépticos sobre la implementación práctica de las medidas, citando la falta de capacidad (25%) y directrices directivas poco claras (20%) como principales desafíos. En consecuencia, a las empresas sanitarias les resulta difícil desarrollar una estrategia eficaz. Por lo tanto, más del 40% de los encuestados desea una mejor formación para quienes deben aplicar las directrices en la práctica, un 9% más que en otros sectores.
“Las empresas reciben ahora normas uniformes para toda la UE, lo que resulta especialmente ventajoso para el sector sanitario. El CSDDD permite a las empresas del sector sanitario hacer más transparentes sus cadenas de suministro. Las empresas del Reino Unido con operaciones internacionales deben considerar cuidadosamente cómo alinear sus operaciones con las de la UE”, explica Sabrina Morton, directora de INVERTO y experta en el sector de la salud.
«Esta nueva directiva es un recordatorio de que las empresas del Reino Unido todavía se ven afectadas por las nuevas leyes y directivas de la UE y están en deuda con ellas».
Los departamentos de adquisiciones desempeñan un papel importante en la implementación de la ley. Por lo tanto, deberían tomar la iniciativa para garantizar una mayor transparencia en la cadena de suministro. Las empresas deberían solicitar activamente a sus proveedores los datos faltantes y ajustar sus procesos en consecuencia. Esto es cada vez más importante a medida que las empresas con sede en el Reino Unido buscan alinear sus cadenas de suministro en todo el continente.
“Al crear transparencia, las empresas pueden identificar oportunidades de ahorro de costos y reasignar recursos. Esto contribuye a la eficiencia operativa y, por tanto, promueve la innovación y la competitividad”, afirma Sabrina Morton.