Ferry Hagen estudia hongos patógenos para comprender mejor la resistencia a los medicamentos y desarrollar nuevas herramientas de diagnóstico.

Marjan Vermaas

Resistencia a medicamentos en hongos como Candida auris y Aspergillus fumigatus conduce a infecciones difíciles de tratar, lo que les valió la distinción de «críticas» en la clasificación de la Organización Mundial de la Salud. Lista de patógenos prioritarios para hongos.1 Las bacterias resistentes a los medicamentos suelen recibir la mayor parte de la financiación y la atención de la investigación, pero los expertos advierten sobre la creciente amenaza de la resistencia a los antifúngicos. Ferry Hagenmicólogo médico del Instituto de Biodiversidad Fúngica de Westerdijk, analizó el desafío de lograr el reconocimiento del problema y desarrollar terapias y herramientas de diagnóstico.

¿Por qué se refiere a la resistencia a los antifúngicos como “la pandemia silenciosa”?

Si bien la resistencia a los antibacterianos es ampliamente reconocida, resistencia antifúngica no ha recibido la misma atención.2 Una razón es que la resistencia a los medicamentos fúngicos se propaga mucho más lentamente que la resistencia a los antibacterianos. Por ejemplo, hace 20 años, los resistentes a los antifúngicos fumigatus Las cepas eran raras, pero ahora el 15 por ciento de las cepas aisladas en los Países Bajos son resistentes a una de las tres clases de antifúngicos. Otras especies incluso presentan resistencia a dos clases.

¿Qué dificulta el desarrollo de nuevos antifúngicos?

Encontrar compuestos antifúngicos que se dirijan a los hongos sin dañar a los pacientes es un desafío debido a la similitud entre las células fúngicas y humanas. Además, desarrollar nuevos antifúngicos lleva de 10 a 15 años, pero para entonces, muchas cepas de hongos ya han desarrollado resistencia debido a la exposición a antimicrobianos agrícolas que se dirigen a moléculas similares.3

¿Por qué está interesado en la secuenciación del genoma de los hongos?

Actualmente, los conjuntos de datos sobre hongos médicamente relevantes están incompletos, en gran parte porque se recopilaron utilizando el mismo locus genético, pero en algunos grupos diferentes loci pueden identificar mejor las especies de hongos. Además, el campo carece de herramientas de diagnóstico de hongos, lo que limita la toma de decisiones en los estudios clínicos y epidemiológicos. Aumentar la cobertura de los datos de secuenciación del genoma de los hongos podría mejorar la detección e identificación de los hongos y brindar información sobre los genes que orquestan la resistencia a los antifúngicos.

Esta entrevista ha sido editada para mayor extensión y claridad.

Por automata