251c7252 2d68 485c 8f66 Ad42ff73acaf 16 9 Discover Aspect Ratio Default 0.jpg

Pedro Sánchez debería haber estado aquí. Los comités federales siempre empiezan con una intervención en abierto del secretario general, pero nada este sábado es normal desde que el presidente del Gobierno anunciase hace tres días que piensa seriamente en dimitir y se toma hasta el lunes para reflexionar en la intimidad si “merece la pena” continuar tras la campaña de “acoso” a su mujer, Begoña Gómez, y la admisión a trámite de una denuncia de la organización ultra Manos Limpia por supuesto tráfico de influencias. Desde entonces, los socialistas se encuentran en shock, sin terminar de asimilar lo que ha pasado y lo que puede pasar. De arriba a abajo en el partido, en la Moncloa y en las federaciones del partido, el ambiente es pesimista. La sensación generalizada es que tirará la toalla. Pero, en un último intento, el PSOE ha convertido este sábado su sede en un clamor para que Sánchez resista.